martes, 17 de febrero de 2015

18 segundos duelen...

Me he pasado la madrugada contando, no ovejas como podría esperarse de una noche de insomnio. He contado segundos...hasta 18, una y otra vez...5 veces, 10, 20, 50. Me detuve en 100, quería saber, sentir el breve lapso de tiempo en el que un centenar de mujeres han sido golpeadas, violadas, o vejadas. 18 segundos, no son nada y son todo. Es el el tiempo que, según Naciones Unidas, transcurre entre maltrato y maltrado a una mujer en algún lugar del mundo. Lo suficientemente grave, lo suficientemenete feo, para que cuente hoy de 18 en 18. Contar y no parar... El resto del dia lo pasaré contando hasta 603 millones, contaré una por una a los 603 millones de mujeres que viven en paises donde la violencia de género no está considerada como un delito...y contaré uno por uno, hasta que se haga de noche a sus hijos, víctimas también de la violencia cruel. Y me dormiré contando a los 120 millones de niñas, menos de 1 cada 10 que han sufrido un coito forzado o han sido víctima de abusos sexuales y...cuando despierte seguiré...y contaré a los 133 millones de mujeres que en su infancia sufrieron mutilación genital, y a ese 38% de mujeres que son asesinadas cada año por su parejas y que convierte a la violencia machista en la primera causa de muerte de las mujeres de entre 15 y 44 años en el mundo. Hoy recuerdo a Carmen, Puri, Conchita, Maria Luisa...mujeres de cartón piedra con nombres ficticios a las que alguna vez entrevisté, de quienes olvidé sus nombres reales y sus rostros, pero no sus palabras. Sus palabras se quedaron grabadas, como se graban en el alma los insultos, los desprecios, las amenazas. Los “no vales para nada”, “eres una mierda”, “te vistes como una cualquiera”, los “aquí mando yo a ver si te enteras”, los “la próxima vez que me contestes vas a saber lo que es bueno”. Las cicatrices que dejan los insultos no se cierran nunca, los golpes duelen menos aunque sus huellas se vean más. Aunque maten....

lunes, 28 de mayo de 2012

Felicidades...

Hace 2 horas que me he despertado, como cada lunes, martes, miércoles, jueves y viernes , el despertador ha sonado a las siete y media. Ha sido una noche corta, pero placida,sin sueños, sobresaltos...Me gustan las noches así. He abierto los ojos pensando en como sería nuestra vida si Nel se levantase solo, como cualquier chico de su edad, si el mismo se duchase, buscase su ropa, se preparase el desayuno y no necesitara a :¡¡¡MAMÁ¡¡¡ para cada cosa que hace.Pensaba en el beso que me daría para despedirse, en el sonido de la puerta cerrándose a su paso. En definitiva en otro Nel. Un Nel que no sería mi dulce Nel. Un Nel empalagoso como la miel, que habla por los codos, que pide atención para sus trucos de magia, que te recuerda lo que te olvidaste o tienes que hacer. Un "fedor" de un metro treinta centímetros que me mantiene atada a él como nada, como nadie. Se ha ido al colegio, como cada mañana, refunfuñando:" que tarde voy, tenemos que levantarnos un poco antes, es que tardamos mucho en vestirnos"...Mientras le pierdo de vista en la esquina del Encanto, dejo de escuchar la tracción de las ruedas de su sillita. Hace calor en este 28 de Mayo. Hoy exactamente hace sesenta y tres años que mis abuelos se casaban, 4 años que yo me divorciaba. Efemérides varias que justifican algunas felicitaciones.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Ser enano

Hoy me encontrado en el correo con un mensaje de Alpe.Lo he leido, he pensado sobre él y aunque ni me afecta, ni me hiere, ni me preocupa, hay personas en mi entorno, familias, afectados a los que "comentarios" como el que hacen en este programa y apropósito de una noticia que no tiene demasiada profundidad...se sienten maltratados, dolidos, objeto de risa, incomprendidos porque a pesar de que estamos en el siglo XXI el enanismo no se acaba de entender como una discapacidad, o diversidad funcional como se denomina ahora. Lo que es en realidad es la acondroplasia es una mutación cromosómica, como lo es el síndrome de down o de Pataw. El 80% son espontáneas, de padres sin antecedentes, padres sanos, jóvenes, de talla completamente normal...Lo cierto y bastante triste es que todavía nos encontramos con que el enanismo sigue provocando gracia, mofa, por tanto dolor a los que lo sufren, fundamentalmente a las familias de los afectados. No es el caso, por suerte ni a mi ni a los míos nos importan ya las miradas, los comentarios... después de 15 años de "convivencia" con esta "condición" uno se acostumbra a todo. Pero entiendo a los que sufren la desolación, la impotencia de traer al mundo a un hijo "diferente". Hasta aquí he hablado como madre, si hablo como periodista , me limitaré a decir que la forma de abordar la información en la mayoría de los programas que se emiten en televisión, máxime en algunas cadenas como Tele 5, ni me gustan, ni los veo, ni los entiendo. El vacío que me provoca tanta superficialidad, tanta crueldad, tanta mentira, es tan grande como el sentimiento de rechazo. Soy consciente, sin embargo, de que tienen muchísima influencia en la sociedad, por ello escribo este post, porque me siento con la responsabilidad y la necesidad de hacerlo público y sueño con un día en el que los "diferentes" sigan siéndolo, pero con el respeto y la consideración que todo ser humano se merece.

Luna

La luna se puede tomar a cucharadas o como una cápsula cada dos horas. Es buena como hipnótico y sedante y también alivia a los que se han intoxicado de filosofía. Un pedazo de luna en el bolsillo es mejor amuleto que la pata de conejo: sirve para encontrar a quien se ama, para ser rico sin que lo sepa nadie y para alejar a los médicos y las clínicas. Se puede dar de postre a los niños cuando no se han dormido, y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos ayudan a bien morir. Pon una hoja tierna de la luna debajo de tu almohada y mirarás lo que quieras ver. Lleva siempre un frasquito del aire de la luna para cuando te ahogues, y dale la llave de la luna a los presos y a los desencantados. Para los condenados a muerte y para los condenados a vida no hay mejor estimulante que la luna en dosis precisas y controladas. Jaime Sabines

viernes, 16 de marzo de 2012

PINOCHOS DE ANDAR POR CASA

9 8 7 6 5 4 3 2 1 ....y será 25 de Marzo

Que se acabe la mentira electoral. Que termine. Que gobiernen. Que nos dejen.

Espero la última de las entrevistas electorales de estos comicios extraordinarios, atípicos, ilógicos, inevitables.Brillante.

¡Que país, que mundo, que medios de incomunicación¡

lunes, 28 de noviembre de 2011

LÁGRIMAS EN LA LLUVIA




Javier Cueva  ha muerto. Ha muerto de un derrame cerebral. Tenía 50 años, mujer, madre, hermanas y el deseo de unos hijos. Hijos que la naturaleza  le negó y que  ya nunca tendrá. Javi es el primer amigo que se me muere. Duele...

Los veo de lejos, mientras entro con el coche al tanatorio. Allí están en corro: Begoña, Monchu, Pablo Santiso, Valdés, Viti,  Montse, Yoli.... Me siento pequeña, quiero ser pequeña...“Al corro de la patata, comeremos ensalada, como comen los señores, patatitas y limones”.
Otro nudo más en el estómago. Aparco el coche. Allí están, como una manada de elefantes que ha perdido a su matriarca en plena sabana, sin rumbo. Como pesa el alma. Valdés me abraza, lloramos.

_¿Quieres verlo, Almu?

_No.

 Se abren las puertas de la memoria, puertas que los sentimientos cierran y abren a su antojo. Oh, dios mio...No quiero recordar, hoy no. Llegan Eugenio e Inés. Monchu se emociona al verlos. Pienso en lo  delicioso que resulta cuando se quita el vestido de bufón y es él. Lleno de buenos sentimientos, emociones, de tristeza fermentada por el paso de los años. Soy yo quien abre el turno de preguntas. Él contesta y también pregunta, mientras los demás escuchan. Lo veo bien, me gusta verlo así.

Valdés recuerda aquel curso de 1993, el mismo  curso de mi ingreso en Protección Civil. Las noches de sidras y parrochas bajo  los Arcos del Campillín, y en ese momento como acudiendo a la llamada de la manada,  llegan Geli y Pedro.

Geli tiene los ojos vidriosos. En Enero murió su madre, acabo de enterarme... Geli, muchas veces desee ser como ella. Hoy, después de varios años sin verla, vuelvo a desearlo. Bella, dulce, digna...así es. Comienza el funeral, la cojo del brazo y bajamos juntas las escaleras. No me gusta el tanatorio, no me gusta ese descenso, no es un sitio para él.

_Almu, llevo todo el día pensando en ti...

_Y yo en ti, Geli.

_¿Te acuerdas de las tardes que pasamos en Purificación Tomás?


_Todavía guardo la carta de que me escribisteis por mi veinticinco aniversario.

_Me gustaría leerla Geli, no me acordaba.

No hay hueco en el banco para las dos. Me siento sóla. No veo la caja. En el primer banco está su mujer,  su madre,  sus hermanas...Pobrecitas. En ese momento recuerdo  la casa en  que creció, en la Avenida de Torrelavega, encima de la tienda de muebles.

De pronto, el suelo se abre  y como si se tratara de  un burdo truco de magia, aparece el ataúd. Sobre él un centro de flores blancas y un pequeño ramo de flores lila. ¡Ay...¡ Comienza la misa.

Quiero salir corriendo. No me gusta ese crucifijo, el agua bendita, esta parafernalia, la vehemencia del cura agonizante que teme que el próximo sea él. No contesto a las oraciones, el chico que está a mi lado tampoco. Eso me relaja. Y pienso en que lo está viendo, en que nos ve  mientras se celebra su funeral. Me da vergüenza tanta fealdad. Se merecía algo mejor. Que acabe.

El suelo se vuelve a abrir...se llevan al collaciu. Me duele mucho el estómago. La tierra se lo está tragando, las llamas del infierno esperan por él. Por primera vez pienso que el infierno existe. Que  locura.

Necesito respirar. En la calle está Pedro, fuma un cigarro. Está lloviendo.

_¿Me prometes que cuando me muera me traerás un par de gaiteros?

_Te lo prometo, Pedro.

_Con lo que a él le gustaba la gaita...

Aparecen los demás. Hace frio.

Bego está destrozada, quiere que el 17 de Diciembre hagamos la cena anual.

_El quería, tenía muchísima ilusión, había puesto la fecha, buscado el sitio.

_Está bien, Bego, la haremos.

_Podemos hacer una placa, y firmar todos en una bandera de Asturias, dice Monchu.

_¿Y si hacemos un funeral a la irlandesa?, dice Valdes.

_¿Toca alguien la gaita?, pregunto

_Creo que Jota, dice alguien.

Durante los siguientes minutos hablamos de si la familia esparcirá las cenizas en el monte, de cuando será, de donde, de si podríamos ir todos. Sí. Buenísima idea. Entramos a la cafetería. La ceremonia de las mesas y las sillas comienza. Monchu  se siente a mi lado, es tan gracioso, consigue una sonrisa de cada uno de nosotros. Falta mucha gente, no se habrán enterado, no habrán podido venir. Bego y Yoli hacen cuentas. Son diez euros por las flores.

_¿Se sabe algo ya de las cenizas?, pregunto. Silencio. Por fin Eugenio empieza a hablar.

_Bueno, si...las van a llevar a Somiedo, pero Pablo le preguntó a la familia y quieren que sea una ceremonia íntima...

_Valdés y yo nos miramos...

Más silencio.

Hace una semana que se fue. No he vuelto a hablar con nadie. No ha habido llamadas, correos. Hoy ha salido el sol , el mismo sol que él llevaba en el corazón y  el  cielo está azul, el  azul de su mirada. Y pienso en él y  deseo volver a verle, y hablar durante horas delante de una botella de sidra y unas parrochas...y pienso en estos últimos años, en por qué no lo hicimos, en el sms que le envié estas navidades y me alegro de haberlo hecho. Pienso en la gente que  me importa, que quiero, en la que no veo no sé muy bien por qué, y me arrepiento y me digo que  esto va cambiar, que voy a vivir como debería vivir, como si hoy fuera el último día.


(El título de este post es un homenaje a Rosa Montero y su libro del mismo nombre.)

sábado, 19 de noviembre de 2011

LLUEVE

Por fin llueve. Llueve en la "jornada de reflexión", lo que en la terminología política viene a significar que el de hoy es un día para que los ciudadanos  piensen en que opción política van votar mañana. Chorradas. Una de tantas a las que nos tiene acostumbrados esta "nueva" sociedad que hemos ido construyendo o destruyendo, no sé... entre todos.

Más Reflexión.